Por: Miriam Rizcalla de Cornejo
El realizador de la película: La inocencia de los musulmanes, no midió las consecuencias de lo que hacía cuando decidió llevar a cabo esta producción.
El filme, que representa un irrespeto al Islam ha enfurecido a los musulmanes e indignado de tal manera, que hoy le ha costado la vida a muchos inocentes, empezando con la muerte del embajador de Estados Unidos en Libia y tres representantes más del gobierno norteamericano, entre otras víctimas.
Una feroz ola de violencia se vive en el Medio Oriente, como muestra de repudio a esta producción-provocación.
En los últimos días las manifestaciones se han acrecentado y tenido un efecto multiplicador, ya que son varios los países vecinos donde grupos protestantes se han lanzado a las calles generando un caos total.
Hoy, en Líbano, los manifestantes protestan por el contenido de la película y por la visita del Papa Benedicto XVI en este país.
Por su parte, el creador del filme se reafirma en sus palabras dichas desde el principio: "El Islam es un cáncer"...
La Iglesia Católica hace un llamado a la paz y al respeto profundo de las creencias religiosas, algo escencial para la convivencia pacífica de los pueblos.
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