Por: Miriam Rizcalla de Cornejo
Nueva York azotado por el calor. Hace tres días que se vienen registrando altas temperaturas, cerca de los 100 grados.
Luego de tantos meses temblando de frío, despierta el sol desde temprano y sopla fuerte su bocanada de calor.
Las playas, atiborradas de gente buscando la frescura de sus aguas, son los sitios más buscados por muchos, aprovechando las vacaciones escolares.
Como medida de seguridad, por parte de las autoridades, varios centros de enfriamiento fueron puestos a la disposición de aquellos más susceptibles a las fuertes temperaturas, como es el caso de los niños, ancianos y personas con padecimientos especiales.
Los parques abren sus fuentes de agua y los pequeños permanecen allí largo rato, jugando y divirtiéndose mientras se refrescan.
En general, cada quien se las arregla para hacerle frente a esta ola de calor y salir airoso de ella.
Protección solar y tomar mucha agua cobra más importancia que nunca. Ingerir la mayor cantidad de líquido posible es la recomendación de siempre, que no debe ser ignorada para evitar la deshidratación.
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